El universo fantasmagórico
"Sombras"
Cuando leo un
periódico, escucho la radio o veo la televisión, realmente tengo minutos
terribles de tristeza por todos los aconteceres del mundo actual, pienso que me
es imposible comenzar una vida verdaderamente plena, perdiendo todo
conocimiento, toda conciencia de lo real; Mi despertar, tras fantásticas
noches, me es verdaderamente penoso. Al contemplar a mí alrededor a ese
enjambre humano girar en el tornado de la vida. De esta vida que se renueva
continuamente, con un nuevo nacimiento. En cambio mis sueños son los mismos,
convirtiéndose así en esclavos de mi propia sombra. Mis pensamientos son como
el cirro que eclipsa el sol, y se convierten en cenizas al renacer la aurora, y
si una nueva vida, con un nuevo germen no viene a alimentarla, esa ceniza acaba
por asfixiarme.
El universo fantasmagórico palidece el semblante
como las hojas amarillentas de los plataneros cuando llega el otoño. Más si uno
se libera de los negros pensamientos llegará a la vejez con una vida de
ensueño. ¡No se puede vivir sin el presente ignorando la realidad de ese
presente! Veo transcurrir los días, la pobre materia siente que el espíritu, el
dulce espíritu material me empapa como una esponja con su linfa de amargura. Y
uno busca el perlado rocío que se va desprendiendo de las eternas entrañas del
alma.
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