¡Oh, chopo hermoso!
¡Oh
chopo hermoso
De
ocre teñido,
Por
el barro limoso
Del
cauce del río.
¡Oh,
chopo vigoroso!
Que
has resistido,
Sin
ser ostentoso
El
viento y el frío.
El
agua del cielo
Y
de las correntías,
Haciendo
de freno
A
las inclemencias.
Has
guidado el curso
De
este riachuelo,
En
todo el transcurso
Que
tienes de tiempo.
Quién
sabe si un día
Todo
florecido,
Seas
la codicia
De
un desaprensivo.
Y
de ti haga leña
Para
ser quemado.
En
la lumbre hogareña
Del
que te ha talado.
Y
también, ¡quién sabe!
Si
un día un retoño
Brote
con tu fuerza
Y
se haga frondoso.
Y
el día de mañana
Su
noble madera,
Sea
aprovechada
En
instrumentos de cuerda.
Guitarras
sonoras,
Bandurrias
risueñas,
Pianos
de cola
O
en batutas maestras.
En
mágicas arpas
De
dulces tañidos,
O
en sencillas flautas
Que
tocan los niños.
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