Los jíbaros
"viajes"
"viajes"
En el este de Ecuador,
Entre los ríos Morona,
Santiago y Pastaza,
Afluentes del Marañón,
Había unos indios
¡Qué
miedo daban!
Con los cuerpos desnudos
Y las caras pintadas.
Se ocultaban en la maleza
Y de allí, nos disparaban
Puntiagudas flechas
Con sus cerbatanas,
Eran muy pequeñas
¡Pero envenenadas!
Alguno pagó alto precio
A su valentía osada,
Por convertir aquella selva
En una tierra calcinada.
Si alguno capturaban
Le cortaban la cabeza
Y se la reducían luego
A un cuarto de lo que era
Sin cambiarles el aspecto.
Eran sus trofeos de guerra,
Los llevaban colgando
Cual crucifijo en el pecho,
Demostraban así su valor
E intentaban echar de su tierra
Al extranjero conquistador.
No conocían escopetas,
Ni luz, ni la automoción,
Estaban estancados en el tiempo
Que para ellos, nunca pasó,
Y Ahora estaban pagando
Aquel lamentable error.
Hay que vivir en los tiempos
Y hablar siempre en alta voz,
Aunque alguno esté sordo
Y no te muestre atención.
Yo a veces me pregunto
¿Por qué
motivo o razón
Ignoran los gobiernos
A toda una nación?
Se encogen de hombros,
Se cruzan de brazos,
Nadie mueve un dedo
Para remediarlo.
¿A caso no somos todos
Hijos de un mismo hacedor?
Decimos
siempre que sí;
¡Pero es evidente que no!
***
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