jueves, 12 de enero de 2023

El ego de los dioses terrenales I

 

El ego

de los dioses terrenales

I




 Hay libros que dejan huella en el subconsciente

Como si fuesen documentos  de un archivo.

Una película,  una canción, un poema…

Aunque en un principio,

No  se le encontrase ningún sentido

Porque ni siquiera lo llegamos a comprender

Al ser nuestra mente demasiado infantil;

Pero la manzana de los sentimientos

Llega a un punto en que madura

Y la sentimos cuando por su propio peso

Nos cae sobre la cabeza.

Es entonces cuando te lleva al escenario

Donde se escenificó ese pensamiento,

O esa vivencia que el personaje experimentó.

Es entonces cuando uno se siente protagonista

Cuando esos mismos sucesos se presentan ante ti,

Convulsionando tripas y corazón

Y las emociones afloran

Como las mariposas afloran en la primavera.

Es entonces cuando las preguntas obtienen respuesta,

Posiblemente porque caminamos por veredas

Que otros hicieron antes que nosotros.

Una rodada profunda, es señal inequívoca

De que antes llovió y se formó barro;

Un barro que se hundió dejando cicatriz

Por el peso ejercido.

Ahora hay razones de peso:

Razones de por qué existe el amor,

La violencia y alambres de espinos,

Porque hay cosas acotadas a una mayoría,

Porqué no basta con nuestro sudor

Para poder comer incluso aquello que sembramos.

Seguramente porque esa cosecha

Para lo único que sirvió fue para pagar

El arrendamiento de una tierra

Que alguien heredó, no se sabe bien por qué.

Como también no se puede conseguir un amor

Cuando alguien, por su cara bonita

Dice que es su dueño desde el mismo día que nació.

Por eso están los alambres de espinos

Para recordarnos que lo que estás viendo

Ya tiene dueño o rey.

No hay comentarios:

Publicar un comentario