Pisoteando amores
Hará trotar su caballo
aunque pisotee las flores;
Es chulo ya acostumbrado
a pisotear amores.
Un amor asomó el cuello
Como si fuera un islote,
para ver el bello cielo
con valor de mil lingotes.
Siempre pasa y ha pasado
en esta nuestra vida efímera,
que lo más bello es cortado
porque a alguien alegró la vista.
Bien sabido es que la rosa
floreció en bello rosal;
pero la más linda rosa
fue la primera en cortar.
La belleza que surge de la tierra
dura ¡vamos! un instante,
pues el hombre a ella se aferra
desde el momento en que nace.
Le gusta lo que destaca,
lo que es más impresionante,
y con sus manos la ataca
y provoca herida cortante.
Impresionante es una puesta de sol
y el vientre donde se nace,
mas nada es comparable al amor
que en el instinto subyace.
Es atrayente y fascinante
el fijarnos una meta,
porque allí donde no se llega
logra y alcanza el poeta.
Canciones que te hacen tropezar,
especialmente las referidas al amor,
que son infinitas como para empezar,
pero todas llevan hasta El Creador.
Los asfaltos parecen no tener fin,
Y en el amor se haya la verdad,
somos objetos para conseguir
si estamos hechos para agradar.
Luego, esos deseados objetos
se acaban por conquistar,
y una vez ya conquistados
se arrían y tratan de olvidar.
Y eso, es lo que pasó a la flor
que germinó en mitad de la calzada,
que cuando estaba en plena floración
un viajero sin escrúpulos
tras pisarla, luego le dio una patada.
Da igual que seas margarita
o seas diente de león,
la flor que un día se conquista
en las manos marchitó.
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