Un amor ya conquistado

 

Un amor ya conquistado

 

Extraño es el proceder de los  humanos;

Aunque habría que preguntarse si los son,

Cuando una vez que  han extendido sus manos

Te retiran su confianza y su perdón.

Hay cosas que son  tabú, algo prohibido,

Un crimen sin derramamiento de sangre,

Pese a que mortalmente estás herido;

Debes vivir ajeno, sin que lo sepa  nadie.

Tienes que apechugar con tu tormento:

Con la ironía de la amarga incomprensión;

Viviendo azotado por el gélido viento

Provocado por una simple equivocación.

Vivir alegre con esta ingrata agonía

Sería algo así como ignorar el pasado,

Siendo el faro que con luz tenue nos guía,

Hasta encallar para saber que has terminado.

No hace falta que busques un mal día,

Él te encuentra sin necesidad de buscarlo;

Te taladra las entrañas con su risa,

Y te exhibe  al  viento cual trofeo laureado.

Esta es la cabeza de un hombre perdedor

Atravesado por un palo el duro cráneo,

Y este es su amoroso y latente corazón

Que hasta muerto sigue todavía soñando.

Cada día que vivimos y que pasa,

Deja impronta en un cuerpo derrotado;

Pues derrota es el que pierde la esperanza

De conquistar un amor ya conquistado.