Amor
y brisa
El campo de mi amor estaba yermo,
Sólo malas hierbas en él crecían;
Y así paso durante mucho tiempo,
Un tiempo que lentamente transcurría.
Y cuando la primavera gloriosa
Regaló sus primeras florecillas,
Aparecieron brisas de victoria
Bronceando mi piel ya curtida.
Soy un hijo de la noche y del viento,
Transitando por callejuelas angostas,
Donde los suspiros y lamentos
Se funden con espesas sombras.
Pero con el despertar de los leones
Para iniciar sus nocturnas cacerías,
Mi vida se lleno de emociones
Sin saber a qué gacela escogería.
La saliva humedecía mis dientes
Y el corazón más deprisa me latía,
Al ver a la lindas adolescentes
Sin tener claro a quien elegiría,
Si a una yegua redomada
O a las potras que se henchían.
Por
una de frente altiva
Fue por quien me decidí,
Y al
ofrecer su sonrisa
Entones comprendí
Que era verdadero amor
Lo que yo
sentía por ti.
Hoy ya tengo amor y
brisa
Y soy hombre muy feliz;
Pues el amor tiene prisa
Cuando este, tardó en surgir.
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