sábado, 18 de agosto de 2018

Sigo esperando


Sigo esperando

 

 

 

Es  viernes. Sé que has estado.

Una fuerza misteriosa me lo indica,

son ya muchos viernes en letargo

 y mi corazón no se lo explica.
 

¿Tan mal me he portado contigo?

Yo creo que no. Tú bien lo sabes.

¿Entonces por qué este castigo

de cerrar tu corazón con llave?
 

Vienes cuando sabes que no estoy

 porque yo vengo temprano.

Es cuando puedo. Luego me voy.

Así me lo exige mi trabajo.

 

Tengo horario fijo.

Trabajo lejos.

Tú en cambio, a cualquier hora

 puedes hacerlo.

¿Por qué entonces te niegas

a regalarme un minuto de tu tiempo?

 

Habrá un día que quizá lo comprenda

y conozca las razones de tus actos,

entonces mis ilusiones

se evaporarán como la niebla

tras ser abrasadas por los ardientes rayos.

 

Deseo ver de nuevo en tus ojos

 las fulgurantes estrellas,

para hacer unos manojos

y darte la que prefieras. 
 

No sé si de mí te alejas

o te estás acercando;

pero quiero que sepas

que te sigo esperando.
***

 

 

 

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario