La fuente del amor
El amor ¡Oh fuente sonora!
donde brota el agua clara,
es tan pura y transparente
como el espejo del alma.
Lo malo de dicha fuente
es que tu sed nunca sacia,
y todo aquel que la prueba
bebería hasta
agotarla.
Pero ella sigue fluyendo
con la alegría de mil caras,
abastecida por los rocíos
que generan las mañanas.
Y cuando llega la tarde
y el sol proyecta sus lanzas,
no se inquieta
porque sabe
que siempre
habrá una pareja
de su agua enamorada.
De ella bebieron de noche
cuando las sombras dilatan,
engarzando el bello broche
que las pasiones desatan.
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