Marilyn Monroe

Marilyn Monroe
(1.926-1.962)

 

Tú misma dijiste:

Soy dulce por fuera,

Un cordero

Al que todos quieren acariciar;

Pero por dentro, tengo garras

Y enormes dientes

Y ganas de devorar

Carne humana.

Por dentro tengo tanta hambre

Que me devoro a mí misma

Y no me sacio nunca.

Yo te digo:

Toda tu vida viviste

Como una araña colgando del techo,

Siempre mirando para abajo,

En el suelo, sólo había piedras

De muchos colores mirando para arriba.

En realidad, las piedras

Eran hombres mirando hacia arriba

Para verte a ti.

Y deseabas  estar con ellos

bien arriba.

Ahora tú estás arriba

y abajo, siguen las mismas piedras de colores. 

No te quedes nunca sola

En el ascensor.

Se puede detener.

Y exactamente igual

Te puede pasar con tu corazón.

El río de la vida

Puede transcurrir silencioso.

Lo pueden cruzar gaviotas y navíos

Y sin duda alguna

Puedes hundirte en el río;

Pero cuando eso ocurra,

Estírate de los cabellos,

Ellos, te harán ver la luz.

Eres hermosa  por fuera,

También hermosa por dentro.

Y nunca debes avergonzarte

Al mirarte en el espejo.