martes, 27 de septiembre de 2022

Pulp Fiction

 

Pulp Fiction


Tumbada en el suelo,

En la mano derecha sostiene un pitillo,

Con la mano izquierda el dinero

Y siempre mirando con ojos pillos.

Quizás preguntando ¿por qué miras?

 Observo tu vestido negro,

Zapatos con tacón de aguja,

Y el peinado a lo Cleopatra.

Más nada de eso tendría importancia

Si no dijera que te miro porque me gustas.

Ya sé que  no sabes quien soy

Y jamás podrías imaginarlo,

Pese a que tienes una pistola

Quizás cargada frente a los intrusos.

Ni que decir tiene que tus ojos disparan

Pensamientos furtivos

Como diciendo. ¡Cuidado conmigo!

podría acabar contigo

Antes de que se desprenda la ceniza del pitillo.

Todo podía ser posible en ti

Hasta convertir tus uñas en garras

Y tus dientes en colmillos de felinos.

Mas debo decirte que,

No pretendo causar daño alguno

Sólo me embriago de viento y de deseo,

Pues estoy seguro que roto el círculo

 Vicioso y depredador,

Serías tan dócil como una paloma blanca

Transportando en su pico una rama de olivo,

Y tus senos serían la fuente

Donde bebería todos los días

Para colmar mi sed y mi fuego.

Bailaría contigo la danza de la cobra

Cuyo veneno, no mata

Sino que por el contrario, da vida,

Pues antes de conocerte, yo estaba muerto.

Yo era un joyel sin brillo,

Un alma demacrada,

Una fruta sin sabor,

Una flor cerrada sin fragancia alguna,

Y tú, cual rayo de luz proveniente del sol

Avivaste mis sentidos

Y los deseos que caracterizan a un hombre.

Ahora chocan nuestras miradas

Y tú, preguntas cuando;

Ahora mismo te indico,

Y para empezar

Daría una larga calada a tu pitillo

Para liberar así tu mano derecha

La cual pondría en mi corazón

Para que sintieses mis latidos amorosos,

Después... Todo lo que se pueda soñar.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario