Angeles del crepúsculo
Te pasa como al buen vino,
Sin necesitar de apaños
Tu cuerpo es más divino.
Pero
llegará un momento
Que el vino tornará rancio,
Y tu grácil monumento
Lo abatirá el cansancio.
El tiempo es la losa negra
Que acaba siempre aplastando;
Los ángeles del crepúsculo
A ti se están acercando.
Ahora estás muy contenta,
Enarbolando alegría,
Más se asoma la tormenta
Con nubes negras y frías.
Y cada gota de agua
Que antes eran pedrerías,
Se consumirán en la fragua
Y en un mar de naderías.
La vida pasa, el viento pasa,
Los joyeles y ángeles se van,
A consumirse en la brasa
Que llaman Eternidad.