Fue
tan sólo una mirada
Una orquídea rubia se cruzó en mi
camino;
Le hice un saludo marcial
Y sus lagos azules mi miraron;
Quizá preguntándose: ¿Quién será?
Dejaba una pierna al descubierto
En su grácil caminar;
Pétalos blancos cubrían su piel;
Me fascinó; Pero tenía que marchar.
Ya no la volví a ver
Pese a recorrer varias calles
Donde intuí que ella pudo pasar.
El viento la oculto cual niebla densa
Que surge en el amanecer.
Ahora me pregunto:
¿La volveré a ver?
Y si la veo, ¿qué le diré?
Seguramente la llamaré
Y le pregunte su nombre.
Si me lo dice, le haré un poema,
Tendrá nombre de flor ¡Seguro!
Pues sólo una linda flor
Es capaz de conquistar a un soñador.
Fue
tan sólo una mirada;
Pero esa mirada me bastó
Para que su rostro se grabara en mi mente
Como una foto en color.
Si la vuelvo a ver le preguntaré:
¿Pensaste en mí?
¿Se pudo hacer más?
¡Ojala diga que sí!
Y volvamos los dos a mirar para
atrás.
Los ángeles aparecen de esta manera,
Para llamar la atención
De un soñador o de cualquiera.
No deseo un punto y final,
Sino un punto y seguido
Para poder continuar;
El capítulo de una serie
Cuyo suspense e intriga,
Quedó flotando en el aire
Para que el espectador la siga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario